Las islas Columbretes


A poco más de 45 Km. (28millas) de Oropesa (Castellón, España) en el mar Mediterráneo se encuentran las Islas Columbretes,
pequeños pero impresionantes islotes de origen volcánico y convertidas en reserva natural,
refugio durante siglos de piratas, contrabandistas y testigo del comercio griego y romano.

Panorámica de las Islas Columbretes
Hoy en día miles de visitantes y curiosos se acercan cada año para conocerlas, disfrutando de sus maravillosas vistas desde tierra y con equipos de buceo explorando el fondo marino.


Las islas están formadas por 4 islotes:

  • L’Illa Grossa (Columbreta grande): Es la isla más grande del archipiélago y es la única que está habitada y se puede visitar. Durante la ruta guiada que se ofrece se pueden apreciar toda la flora y fauna de las islas, además de las construcciones y unas vistas espectaculares. A esta isla hay quién la llama la Ferradura por su clara forma de herradura.
  • La Ferrera: Se encuentra al oeste de l’Illa Grossa. Debe su nombre a su color parecido al óxido de hierro.
  • La Foradada (La Horadada): Está ubicada al suroeste de l’Illa Grossa. El nombre de Foradada es debido a la gran concavidad en forma de arco y por sus agujeros y grietas, que se hallan en ella.
  • El Carallot (El Bergantín): Es la isla más extraña de todas, ya que es un islote rocoso con forma cónica y tiene 32 metros de altura sobre el nivel del mar.

Vista de las islas da pie de mar

Flora y fauna

En L'illa Grossa encontramos restos de especies vegetales propias de la cuenca mediterránea como palmiteras, lentisco, y zarza morisca, (que anteriormente cubrían todo el islote). En las zonas más próximas al mar también encontramos hinojo marino y zanahoria marina, mientras que en las partes más altas abunda el matorral de sosa fina y la alfalfa arbórea junto con especies endémicas.
Por su parte, aves marinas como el halcón de Eleonor, la gaviota de Audouin, la pardela cenicienta, o el cormorán moñudo, anidan en la islas, y es importante la existencia de la subespecie endémica de la lagartija ibérica (Podarcis hispanica atrata), mientras que en el interior de las aguas podemos encontrarnos con las especies de las algas laminaria o el coral rojo.
Desde el punto de vista de las comunidades vegetales bentónicas merece destacarse la presencia de especies como la Cystoseira mediterranea, Cystoseira amentacea, Cystoseira spinosa, Cystoseira zosteroides y Laminaria rodriguezii, especies incluidas en el anexo II (especies en peligro o amenazadas) del Protocolo sobre las Zonas Especialmente Protegidas y la Diversidad Biológica en el Mediterráneo.


El faro de las islas

Un poco más de historia

  • El nombre Columbretes, se lo dieron los romanos al darse cuenta de la gran cantidad de serpientes que allí habitaban. Posteriormente desaparecieron debido a un incendio provocado para acabar con ellas.
  • Entre 1856 y 1860 se produjo la verdadera colonización de las Islas Columbretes, ya que se realizo la construcción del faro para guiar a las embarcaciones que pasaran por allí por la noche.
  • También los contrabandistas han utilizado el archipiélago como refugio hasta tiempos no tan lejanos. De hecho, todavía en el siglo XX se tenía constancia de sus actividades en las islas. El archiduque Luís Salvador de Austria, quien pasó un tiempo en las Columbretes (de ellas publicó un libro en 1895), explicó cómo las visitas de estas gentes se producían intermitentemente. Según cuenta, la mayoría de ellos eran mallorquines, aunque en sus naves ondeaba la bandera inglesa. El paso de contrabandistas por las Columbretes motivó que las autoridades destruyeran, mediante explosiones, parte del túnel marino de La Foradada, que ocultaba a aquellos de los servicios de vigilancia.


Panóramica de el faro de las islas


ver en Google Maps


No hay comentarios:

Publicar un comentario